CAMINOS PÚBLICOS


En este texto Héctor M. Quijada (CARAMUCEL, naturaleza e historia) hace una aproximación a los caminos públicos en nuestra comarca, las formas de identificarlos, conocer sus trazados, sus usos o valor cultural. Una manera de introducirse en el conocimiento de estos elementos de gran importancia a nivel territorial, así como a la hora de desarrollar las diversas actividades que tienen como escenario el medio natural y rural.

Los caminos públicos han surcado desde antiguo el territorio en función del uso que le han dado sus pobladores. Sobre ellos se han desarrollado los movimientos necesarios para la obtención de los recursos, siendo vías de comunicación, de intercambios comerciales y culturales entre los municipios vecinos. A través de ellos seguimos accediendo hoy en día a multitud de lugares para actividades muy diversas, sin embargo la mayoría de veces apenas somos conscientes de ello mientras los usamos para desplazarnos hacia las zonas rurales, los campos, los espacios naturales o cualquier rincón de nuestras montañas donde realicemos alguna actividad recreativa en la naturaleza.

Generalmente, los caminos que han sido utilizados desde antiguo encierran por sí mismos una indudable importancia histórica y cultural. Pero además, el medio donde se encuentran hace que muchas veces gocen de una especial singularidad, cuando por ejemplo transitan por áreas rurales poco alteradas desde el punto de vista paisajístico, junto a elementos del patrimonio cultural, así como al atravesar espacios montañosos de especial interés desde el punto de vista de la conservación de la naturaleza, ya sean Montes Públicos o Espacios Naturales con alguna figura de protección legal.
En muchos casos el abandono de los usos tradicionales que venían dando en estas zonas ha provocado el abandono de muchos tramos de caminos o bien su sustitución por vías de relativa nueva construcción, lo que ha devenido en una progresiva degradación y olvido en un medio cuya propia dinámica natural, con el avance de la cubierta vegetal, no hacen otra cosa que acelerar su desaparición. Esta situación ha sido aprovechada en algunos casos para la usurpación, ocupación o cierre de estas vías públicas por parte de algunos propietarios de terrenos.

En el Valle de Ricote son pocos los autores que han tratado expresamente el asunto caminero desde el punto de vista de la investigación y la divulgación. Entre los que lo han hecho, cabe citar a José David Molina Templado, que ha abordado la temática caminera centrándose principalmente en las vías de comunicación entre sus pueblos (MOLINA TEMPLADO, J.D, 2003), tocando también el tema en el entorno de la Sierra del Oro. Jesús Joaquín López Moreno, que lo ha hecho con sus trabajos de investigación sobre las vías pecuarias y los accesos al Valle de Ricote, destacando lo referido a la Calzada Romana Carthagonova-Complutum, así como su propuesta de rutas históricas dentro de este marco geográfico, desde Cieza hasta Archena (LÓPEZ MORENO, J. J., 2007). En los últimos tiempos, fruto de nuevos trabajos de Investigación dedicados a otras temáticas, también podemos encontrar referencias a antiguos caminos o vías de comunicación en la zona que nos ocupa. 

Algunas de las fuente identificar la existencia y trazado de las sendas antiguas, veredas y caminos son básicamente cartográficas (TRUJILLO CARMONA, M., 2010). Entre éstas, los trabajos topográficos del Instituto Geográfico Nacional (IGN), la serie de planos realizados a escala 1:25.000 y organizados por términos municipales, desde finales del siglo XIX y principios del XX; los Planos Topográficos del IGN, a escala 1:50.000, editados a mediados del siglo pasado; la cartografía actual del IGN, a escala 1:25.000; los planos de amojonamiento de los Montes del Catálogo de Utilidad Pública (C.U.P.), elaborados por la Administración Forestal del Estado; el Catastro Moderno; así como las fotografías aéreas de los distintos vuelos, desde 1946, disponibles en los distintos visores digitales (Cartomur, SIGPAC, etc.). Si es posible, también es interesante contar con aportaciones orales, trasmisoras de la memoria histórica de los vecinos de los pueblos, las cuales resultan en muchos casos esenciales y clarificadoras. Esto, unido al conocimiento adquirido durante los obligados recorridos sobre el terreno, viene a constituir un importante conjunto de fuentes de información, aunque no el único. En el caso particular de las veredas de ganados, hemos de añadir el irremplazable papel que juegan las Actas de Deslindes y Proyectos de Clasificación de Vías Pecuarias de cada municipio, confeccionados a lo largo del siglo XX.

Una denominación adecuada que engloba los tres tipos de caminos públicos que enunciamos en el título del presente texto podría ser la de caminos tradicionales. Al mismo tiempo, también podemos establecer una clasificación más variada según sus tipos, tanto en base a la naturaleza “legal” de cada uno de ellos, como por la función para la que fueron creados. Nos vamos a basar en este caso, en la clasificación propuesta por Hilario Villalvilla en su trabajo “Los caminos tradicionales en España y en la Región de Murcia” (2002), para determinar la tipología de caminos que podemos encontrar en la comarca del Valle de Ricote.
De esta manera y según su naturaleza “legal”, podemos encontrarnos con caminos públicos municipales, caminos públicos de la comunidad autónoma y vías pecuarias, pudiendo añadir a esta clasificación las servidumbres públicas, en este caso las asociadas a las márgenes de los cursos fluviales, que serían del Estado.

En cuanto a las funciones a las que se han dedicado, o se dedican en la actualidad, nos encontramos con un variado abanico de usos y tipologías de caminos, como son:

- Sendas y caminos del sistema de comunicaciones terrestres en el medio rural y natural (accesos al monte y a enclaves para aprovechamiento tradicional de los recursos naturales, accesos a predios de labor, acceso a los montes para trabajos forestales y vigilancia de los mismos, actividades de ocio y recreo -senderismo, bicicleta de montaña, cabalgada, etc.-). A partir de estos caminos que accedían a los principales parajes de la sierra, nacían numerosas sendas y trochas de carácter más angosto, denominadas de forma genérica veredas, que accedían a puntos o áreas más localizadas y menos accesibles, utilizándose también como atajo.
- Caminos locales del sistema de comunicaciones terrestres en el medio rural y natural (movimiento de maquinaria agrícola y movimiento de ganado, acceso a almacenes e instalaciones de la actividad agraria, vigilancia rural, acceso a terrenos agrícolas, comunicación vecinal -acceso a núcleos rurales, casas habitadas o segundas residencias-, acceso a montes para labores de gestión y vigilancia, romerías, actividades de ocio y recreo –senderismo, cicloturismo, cabalgada, etc.). Se trata de algunos de los caminos más comunes, extendidos y utilizados en las zonas rurales de nuestros pueblos.
- Caminos forestales. Discurren o dan acceso a los Montes Públicos, sirviendo para la gestión y aprovechamiento de los recursos naturales (trabajos forestales –saca o extracción de productos forestales y transporte, acceso de los servicios de prevención, vigilancia y extinción de incendios forestales, actividades recreativas –senderismo, bicicleta, cabalgada-).
- Ramblas. Muchos de estos cauces1, que se encuentran secos o con escasos caudales la mayor parte del año, son utilizados tradicionalmente como vía de comunicación. En algunos casos y dada su utilidad, se solapan con otros tipo de caminos y veredas. Los usos son variados (comunicación vecinal, comunicación entre poblaciones o núcleos rurales, accesos a montes, accesos a tierras agrícolas, movimiento de maquinaria agrícola y movimiento de ganado, actividades de ocio y recreo -senderismo, bicicleta de montaña, cabalgada, etc.-).

Otros caminos públicos que podemos tener en cuenta son:

Caminos asociados al Canal del Taibilla. Los caminos de servicio de esta infraestructura hidráulica, que dota de abastecimiento de agua potable a 69 municipios de las provincias de Murcia (43), Alicante (34) y Albacete (2), también pueden ser tenidos en cuenta. En concreto el Ramal Oriental, que se inicia en Bullas para llevar las aguas hasta la ciudad de Murcia, discurre de W a E por la solana del Cejo Cortado, las Sierras de Ricote y El Cajal, subiendo hasta la cumbre de esta última, antes de descencer hacia Ulea, recorrido que hace a través de los términos municipales de Mula, Campos del Río, Ricote y Ojós (MOYA SÁEZ, J.A, 2009).
Caminos ligados a la gestión de embalses. Permiten el acceso, vigilancia y gestión de los embalses. También permiten el acceso al público a la lámina de agua y su entorno natural (pesca, paseo, uso de embarcaciones recreativas, senderos, áreas recreativas, etc). Como por ejemplo, el camino de acceso al área recreativa del Embalse del Mayés, en el término municipal de Ojós.

Vías pecuarias o veredas.

Las vías pecuarias son una tipología de caminos con unas características especiales. Tienen su origen en los movimientos realizados desde la antigüedad por la ganadería trashumante, utilizándose igualmente para la actividad trasterminante y local. También denominados de forma genérica en nuestra comarca como “veredas de ganados”, sirven para acceder a las zonas de pastos. En realidad, el concepto de vereda es aplicable tanto al tránsito de ganado, como al de personas, formándose éstas a partir de los numerosos y variados movimientos que desde antiguo han tenido lugar en todo el ámbito serrano, llegando a conformar en su momento una extensa red de sendas y trochas.

Tal configuración hace que sus trazados sean muy diversos en función del terreno por donde pasan. De esta manera, nos encontramos que pueden discurrir tanto por caminos (carreteros, de tierra o asfaltados), como por sendas, cauces de ramblas o barrancos, así como monte a través. En estos últimos casos, aunque su anchura sea mayor, suele existir un trazado por el que pasar más cómodamente y si no es evidente, lo mejor es intentar guiarse mediante un mapa topográfico.En cuanto a los usos actuales, además del tránsito ganadero, pueden servir también para el de la actividad agrícola, o las actividades de ocio y tiempo libre (senderismo, cicloturismo, cabalgada, etc.), Usos compatibles y complementarios contemplados en la normativa estatal de vías pecuarias.

Vías pecuarias, patrimonio natural, biodiversidad y conservación de la naturaleza.

La importancia de que estos caminos históricos hayan llegado hasta nuestros días viene dada, no sólo por su carácter público que nos da derecho de paso, sino también por las importantes funciones que pueden cumplir hoy.

Juegan un gran papel en la conservación de la naturaleza y mantenimiento de la biodiversidad como corredores ecológicos, conectando espacios naturales y áreas rurales. Su uso también puede contribuir a la prevención de los incendios forestales, por medio del pastoreo, reduciendo de forma significativa el combustible vegetal.
El propio trazado de muchas vías pecuarias supone ya en sí mismo, un elemento de interés por constituir un camino tradicional y con historia, además de atravesar zonas naturales y rurales con bellos, singulares y antiquísimos paisajes propios de nuestra tierra. Se pueden encontrar también toda una serie de elementos asociados, tanto materiales como inmateriales, bien por la actividad ganadera desarrollada (toponimia, abrevaderos, mojones, refugios pastoriles, etc.), o bien por su transcurrir a lo largo de antiguos caminos que encierran valores ecológicos, arqueológicos, arquitectónicos o paisajísticos de diversa índole. De esta forma, en su discurrir podemos encontrar humedales de pozas y abrevaderos, elementos naturales como árboles singulares, espacios naturales, yacimientos, calzadas, edificaciones, canalizaciones, etc. (QUIJADA GUILLAMÓN, H.M., 2010).
1 Los cauces de las ramblas constituyen Dominio Público Hidráulico.

Este texto ha sido extraido y actualizado de: QUIJADA GUILLAMÓN, H.M. (2012), “Sendas, veredas y caminos públicos en las Sierras del Oro y Ricote. Rutas por viejos caminos para el uso público y el acercamiento a la naturaleza”. II Jornadas de Investigación y Divulgación sobre Abarán y el Valle de Ricote. Abarán. En prensa.

Bibliografía:

LÓPEZ MORENO, J. J., “La calzada Carthago Nova-Complutum y sus enlaces con el Valle de Ricote”, Actas IV Congreso Internacional del Valle de Ricote. Ricote, 8/11 Nov. 2007, Ricote, 2007, 339-352
LÓPEZ MORENO, J. J., “La Cañada Real de los Cabañiles o de La Mancha a Murcia, una de las principales rutas prehistóricas en el sureste peninsular”. Programa de festejos de Abarán, 2009.
LÓPEZ MORENO, J. J., “El Valle de Ricote a través de sus fortalezas. Rutas históricas por su poblamiento antiguo y medieval”. Natursport, 2008.
MOLINA TEMPLADO, J.D.; “Los caminos del valle en el pasado”; Actas del II Congreso Turístico Cultural del Valle de Ricote; Mancomunidad de Municipios “Valle de Ricote” – Plan de Dinamización Turística. 2003. Abarán.
MOYA SÁEZ, J.A.; “Rutas en bicicleta por el Canal del Taibilla”, Natursport, 2009. Murcia.
QUIJADA GUILLAMÓN, H.M., “Dominio Público, medio natural y rural en Abarán a través de las vías pecuarias”, Actas I Jornadas de investigación y divulgación sobre Abarán. Asociación cultural “La Carrahila”, 2010, Abarán.
TRUJILLO CARMONA, M.; “Fuentes cartográficas para la identificación de los caminos públicos”; Plataforma “A desalambrar”, Plataforma Ibérica por los Caminos Públicos. 2010. Inédito.

ENLACES DE INTERÉS:

Plataforma Ibérica por los Caminos Públicos (PICP)

No hay comentarios:

Publicar un comentario